Restaurant Alter Hof (Munich, Alemania)

El día 11 de agosto continuamos nuestra estancia en Munich y tras haber comido en el Viktualienmarkt  (un mercado al aire libre donde no sólo se puede comprar comida sino que se puede comer allí, un sitio totalmente recomendable para comer, por cierto) fuimos a cenar a este restaurante que habíamos visto la noche anterior dando un paseo tras nuestra cena en la brasserie de Le Deux. Entramos desde la plaza Marienhof,  situada tras el ayuntamiento, aunque su nombre lo debe al edificio en el que se sitúa que se llama Alter Hof (Antigua Corte) que fue residencia imperial y que está reconstruido tras su destrucción el la segunda guerra mundial. Nos llamó la atención porque anuncian que tienen un "winebar", de hecho el "subtítulo" del restaurante es Fränkische Weinekultur (cultura del vino de Franconia, que es una región cercana a Munich. Como además tenía buena pinta, al menos lo que veía desde fuera, así como la carta decidimos volver a cenar al día siguiente.

Brasserie Le Deux (Munich, Alemania)

El día 10 de agosto llegamos a Munich para pasar los últimos días del viaje. Decidimos salir a buscar sitio para cenar y por no ir por la misma calle que habíamos recorrido a mediodía cogimos una paralela para dirigirnos hacia el centro por otro camino. Resultó ser una calle llena de tiendas de marcas caras (lo que vendría a ser Ortega y Gasset en Madrid) y andando por la misma, en una especie de patio, vimos este restaurante de cutiosa forma triangular. Lo que nos llamó la atención fue el restaurante de la primera planta, que se veía desde la calle. Tenían un menú expuesto afuera así que le echamos un vistazo y como nos gustó, pues entramos. Preguntamos si podíamos cenar y nos dijeron que sí. Nos acomodaron en una mesa en la parte de abajo, cerca de la barra, en lo que denominan "Brasserie". Como nos pareció bien la ubicación ni preguntamos por si tenían mesa arriba, aunque supusimos que estaría lleno (desde la calle no se veían mesas libres, aunque claro, sólo se veían las mesas cercanas a las ventanas. Cuando he buscado información sobre el sitio para escribir esta reseña me he encontrado con que el restaurante ¡tiene una estrella Michelin! (si es que tenemos un ojo...) Viendo este dato, puede que estuviese lleno, o que no nos viese demasiado arreglados (tampoco es que fuesemos mal vestidos, pero bueno) o que se yo. Tampoco queríamos meternos una "cenorra" pero hubiese sido una sorpresa al ver la carta de arriba...

Behringer´s Bratwurstglöcklein (Nuremberg, Alemania)

El martes 9 de agosto llegamos a Nuremberg justo a la hora de comer. Buscamos un lugar próximo al hotel de los que llevaba anotados para probar las afamadas salchichas de Nuremberg. Por lo que había visto, hay tres locales del mismo dueño (Behringer´s Bratwurstglöcklein, Behringer´s Goldenes Posthorn y Behringer´s Bratwursthäusle) que están recomendados incluso por la guía Michelin. Afortunadamente teníamos muy cerca el primero de ellos, Behringer´s Bratwurstglöcklein, que está situado en el Handwerkerhof (Patio de los artesanos). Es un conjunto de tiendas de artesanía y alguna de comida, situado justo frente a la estación central y alojado en un recinto junto a la muralla que incluye este bonito restaurante.

Restaurant Magnolia (Augsburgo, Alemania)

Continuando nuestra ruta de vacaciones, el lunes día 8 de agosto estábamos en Augsburgo y decidimos ir a cenar de entre los restaurantes que llevaba anotado (y de los que estaban abiertos, ya que era lunes y festivo en Augsburgo) a este restaurante situado en el "Glaspalast (Palacio de cristal)", una antigua fábrica textil convertida a hora en un espacio que aloja desde empresas hasta museos.

Ristorante Il Pescatore (Füssen, Alemania)

Continuando con nuestras vacaciones, el día 7 de agosto nos encontrábamos en la localidad de Füssen. Habíamos elegido para cenar el restaurante Madame Plüsch, que se suponía era el mejor de la ciudad de comida tradicional bávara. Como nuestra visita al cercano castillo de Neuschwanstein había sido a última hora y como vimos en la página web del restaurante que cerraban a las once aparecimos allí a una hora que nos pareció prudente, poco antes de las nueve y cuarto. Cual fue nuestra sorpresa cuando nos dijeron que la cocina estaba cerrada. Por si acaso probamos en otro restaurante que hay justo enfrente y nos dijeron lo mismo. Recordé que cuando había buscado información sobre restaurantes en Füssen, el más valorado era un restaurante italiano, Il Pescatore, pero no lo consideré porque estando de visita en Alemania no tenía intención de ir a comer a un italiano. Como era domingo y había algunos restaurantes cerrados, decidimos intentarlo en dicho restaurante, pues pensamos: "hombre, un italiano estará todavía abierto". Nos acercamos y efectivamente, estaba abierto. Cuando preguntamos si tenían mesa nos dijeron que si queríamos cenar dentro tendríamos que esperar, pero que se acababa de quedar libre una mesa en la terraza, así que allí que nos sentamos.