jueves, 1 de septiembre de 2016

Ristorante Il Pescatore (Füssen, Alemania)

Continuando con nuestras vacaciones, el día 7 de agosto nos encontrábamos en la localidad de Füssen. Habíamos elegido para cenar el restaurante Madame Plüsch, que se suponía era el mejor de la ciudad de comida tradicional bávara. Como nuestra visita al cercano castillo de Neuschwanstein había sido a última hora y como vimos en la página web del restaurante que cerraban a las once aparecimos allí a una hora que nos pareció prudente, poco antes de las nueve y cuarto. Cual fue nuestra sorpresa cuando nos dijeron que la cocina estaba cerrada. Por si acaso probamos en otro restaurante que hay justo enfrente y nos dijeron lo mismo. Recordé que cuando había buscado información sobre restaurantes en Füssen, el más valorado era un restaurante italiano, Il Pescatore, pero no lo consideré porque estando de visita en Alemania no tenía intención de ir a comer a un italiano. Como era domingo y había algunos restaurantes cerrados, decidimos intentarlo en dicho restaurante, pues pensamos: "hombre, un italiano estará todavía abierto". Nos acercamos y efectivamente, estaba abierto. Cuando preguntamos si tenían mesa nos dijeron que si queríamos cenar dentro tendríamos que esperar, pero que se acababa de quedar libre una mesa en la terraza, así que allí que nos sentamos.

El local realmente sólo lo llegamos a ver un poco por dentro (y por la parte de atrás, que es donde está la terraza y por donde llegamos), así que no lo describiré mucho, aunque la impresión que daba era de decoración agradable con toques marineros. La agradable terraza (que es la de la foto) con sombrillas que protegían también de la llegada del frescor nocturno nos permitió cenar incluso en manga corta.

El servicio fue muy agradable. Destacar que todos las camareras (creo que sólo vimos mujeres) eran italianas y muy simpáticas y diligentes.

En cuanto a la comida, llegamos con bastante hambre así que decidimos pedir como entrantes a compartir el Vitello Tonnato, que le encanta a mi pareja (riquísimo, por cierto y una ración muy generosa) y unos Mejillones, que elegimos a la Calabresa. La amable camarera nos pregunto si los mejillones también eran de entrante y le contestamos que sí. Cuando llegaron comprendimos el por qué, pues era como un kilo de mejillones. Eso sí estaban buenísimos, me puse has arriba de salsa...

De segundo plato mi pareja pidió uno de los platos recomendados de la carta, Spiga Scampi (pasta rellena de gambas) y yo me decidí por un plato fuera de carta, que estaba anunciado en una pizarra, Linguine Vongole (Tallarines estrechos con almejas). Ambos platos deliciosos y gigantescos. El de mi pareja se lo sirvieron en una fuente (eso no se podía denominar plato) y mis Linguine no tenían menos de medio kilo de almejas. Eso sí, nos los terminamos. Obviamente no tomamos postres porque estábamos cercanos a reventar. Menos mal que con todo el ejercicio que habíamos hecho en el castillo y los desplazamientos desde o hacia el hotel (que estaba como en  las afueras, pero que se comunicaba con la ciudad vieja a través de un agradable paseo junto al río que atravesaba un parque) nos habíamos ganado esta opípara cena. De hecho nos vino bien el paseo hasta el hotel dado lo llenos que estábamos...

Para acompañar la cena seleccioné un vino italiano (como no) basándome tanto en los consejos de la amable camarera, que me recomendó algunos y mis limitados conocimientos sobre vinos italianos. Finalmente elegí el Andrero Nero D'Avola Terre Siciliane IGP Forriero  2014, que estaba bastante bueno y que tenía un precio de 29€. Un poco caro para lo que era (aunque al ser un vino de importación, es lo que tiene...), aunque nos gustó.

Para acabar, dos cafés.

Todo esto, más una botella de agua por 95,70€. Un precio que no parece barato, pero es que fue un auténtico festín. Lo normal sabiendo las cantidades sería, para cena normal, pedir un plato de pasta y si tienes hambre con un entrante a compartir basta.

En resumen, un excelente restaurante italiano de verdad (dueños italianos, personal italiano) en Füssen. Merece la pena la vista.

Para terminar, puntuaré (0 mínimo - 10 máximo): 
Local: 8 
Comida: 9 
Servicio:  8.5 
Precio:  25-50€/pers. 

Ficha: 
Il Pescatore 
Dirección:  Franziskanergasse 13
Localidad:  Füssen, Alemania
Teléfono:  +49 8362 924343
Días de cierre:  Miércoles
Página Web:  http://www.ilpescatore-fuessen.de/



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